Relatos reales de una historia de sexo inhumana. Margot, gracias...

martes, 14 de febrero de 2012

The end

La historia con Margot terminó hace unos meses, pero el fin de año lo pasamos juntos. Bueno todo el día 31. Comió en mi casa y me llevó a una fiesta donde nos devoramos a besos. Yo quería pasar la última noche del año con la persona que más me había impactado ese año. Dormimos junto pero no hubo sexo.


Ayer fué San Valentín y Margot me invitó a cenar a su casa y pasó lo mismo que en fin de año: besos, abrazos, toqueteos, etc. Al final dormimos juntos sin tener sexo porque ella ahora sale con un chico desde la primera semana de enero.  Hemos desayunado juntos por San Valentín. Curioso. Su novio no sabe nada. Aquella pasión que sentíamos ha desaparecido.


Este es el último post de este blog. 


Estoy seguro.

sábado, 8 de octubre de 2011

Si la mesa hablase

Hay fines de semana que se recuerdan durante años. Este que comentaré lo recordaré por ser bonito y dulce mientras estábamos en la playa, en los pueblos que visitamos y en las fotos que nos hicimos. Preparar la cena, comprar el vino, el desayuno del día siguiente, todo era super dulce, menos el polvo encima de la mesa.

Poner a Margot encima de la mesa del comedor y follarla en todas las posiciones ya por si solo es algo muy placentero, porque contra más violencia, más se transforma, pero hacer todo esto mientras de su coño, precioso por cierto, brota la sangre de la regla, es algo todavía más salvaje. Correrse en su coño y oler la sangre, el esperma, su flujo y nuestro sudor es algo inexplicable. Para acabar, su mamada con todos los líquidos me dejan perplejo. Margot pasa del beso más dulce a la máxima locura. Eso me gusta de ella, porque al fin y al cabo, nuestro beso final con las bocas llenas de sémen, por raro que parezca son la máxima expresión del amor que tenemos el uno por el otro. No concibo más amor que este beso final.

lunes, 12 de septiembre de 2011

Película porno

Margot está haciendo que todos mis sueños sexuales sean realidad. La última fantasía fue grabarla mientras follábamos y me corría en su boca. La cogí por detrás, la tumbé en la cama y empecé a meterle mi polla en su coño, mientras miraba su duro y precioso culo, que aún mostraba la marca del tanga que llevaba en verano: esto me ponía muy cachondo.
Con mi mano derecha, el iPhone grababa desde arriba mis abdominales, su culo, su espalda, su preciosa melena y sus maravillosos gemidos. Después de unos minutos grabando ese movimiento tan sincronizado, noté como estaba a punto de correrme.
-Look at me- le dije, mientras ella se giraba y abría su boca con esa sonrisa tan puta que aparece cuando quiere tragarse mi esperma.
Mientras me masturbaba en su cara, ella esperaba con la boca abierta. En pocos segundos me corría en su boca, cara y pelo. Toda ella estaba cubierta de semen. Aún recuerdo la última gota entrando en su boca, mientras el resto se deslizaba por su lengua. Fue entonces cuando empezó a comerme la polla y yo veía el cielo.
Los días que no puedo verla, me masturbo mirando esta película y me doy cuenta de que quiero grabar más. Ya imagino la siguiente: un primer plano de su lengua completamente blanca.

viernes, 9 de septiembre de 2011

Fóllame !!! fóllame !!!

Esos son los gritos de Margot que desatan en mi una violencia espectacular. Cuando grita esta frase, mi cuerpo empuja al suyo, pero sus fuertes piernas aguantan mis golpes repentinos en su coño. Le giro, me la follo por detrás y la empotro contra la pared. Tuerce la cabeza para mirarme mientras le estiro los pelos.
-Fóllame!!!
Ver su cara contra la pared y oír sus gritos hacen que reventar su coño por detrás me provoque orgasmos que hacen explotar mi cerebro...pero vale la pena.
Sin duda, se ha apropiado del verbo follar y dentro de poco aprenderá a gritar "átame!!!!"

sábado, 3 de septiembre de 2011

Bloody Sex

Despertarse con Margot, abrazarla, tocarle el coño y hacer que se corra es una preciosa manera de empezar el día. El polvo posterior parecería un calentón de primera hora del día, pero ver como llega a otro orgasmo mientras está encima mío es algo encantador, pero lo mejor de la mañana llegó dos horas después. Le estaba bajando la regla y volvimos a follar con una pasión muy distinta a como lo habíamos hecho hacía un par de horas.
Supongo que notar la sangre caliente en su coño, ponía mi polla más dura que nunca. Mi ropa interior estaba llena de sangre y Margot se olvidó de mi boca y empezó a hacerme una mamada brutal. Correrme en su boca y ver la sangre, el esperma y su sonrisa provocó el beso en la boca más guarro que nos habíamos dado en la vida. Que aburrido es empezar el día sin Margot. I love you, sweetie.

martes, 30 de agosto de 2011

Sexo en la cocina

Pocas cosas me ponen más que ver a una mujer cocinando para mi y saber que le voy a comer el coño y que no puede moverse porque se le quemaría la cena. Eso es lo que hice una de las primeras noches con Margot. La verdad es que su coño es algo sumamente precioso y creo que mi boca y él se han hecho amigos íntimos. 

Le levanté el vestido, le aparté el tanga y mientras ella decía "que haces" con voz sensual, mi boca empezó a devorarla entera. No tardó mucho en correrse para mi desgracia, ya que me encanta tener mi cara empotrada contra su coño. Me levanté, la puse encima del mueble de la cocina y follamos con tanta intensidad que ese rincón de la cocina ya tiene un recuerdo en nuestra memoria. Cuanto placer en tan poco espacio y no hablo de la cocina.

domingo, 28 de agosto de 2011

10 polvos en 12 horas

Aparentemente era un fin de semana normal: playa, comida, cena, polvo, desayuno, otro polvo, comer y hasta el lunes. Pero no !!!
El camino a la playa en coche fue el preludio de lo que sería el fin de semana más sexual de nuestras vidas (hasta la fecha, con ella nunca se sabe). Comida de polla mientras conducía. Para no ensuciar nada, se tragó el esperma sin dejar gota. Solo de recordarlo me excito de nuevo.
Al llegar a casa había que ducharse y si tuviese que repetir un polvo en mi vida, repetiría este. No exagero si digo que estuvimos una hora dentro de la ducha de cristal, con el agua abierta, follando sin parar: en el suelo, contra la pared, ella en mis brazos, sexo oral, corridas en la cara, ... El cansancio nos llevó a la cena, donde literalmente, cené a Margot entera: en la mesa, en la silla, en el sofá, ... Los dos polvos en la cama fueron lo de menos, si no fuese porque me comió el ano con tanta intensidad que me corrí en su boca, mientras ella sonreía. El beso que nos dimos con el esperma en nuestras bocas, selló nuestro compromiso sexual.
No sé porqué, pero intuyo que no será el último sábado de este tipo. Supongo que los 40 polvos de esa quincena de junio influyen.